A las mujeres nos encanta cambiar de look y por tanto, también el color del cabello o, directamente somos tan presumidas que no queremos que se no vea ni una cana y en cuanto nos aparece, vamos a tintarnos para estar perfectas. Según la CECU, la venta de tintes para el cabello supone un gran porcentaje de toda la cosmética que se vende en la UE, utilizándolos más de un 65% las mujeres y entre un 10 y 15% los hombres, que cada vez se van animando más.
Pero aunque nos parezca extraño, la moda de cambiar el color del cabello no es de nuestros tiempos, ya viene de hace miles de años y es que, esto de ser coquetas no es que nos venga de ahora, parece ser que la mujer siempre lo ha sido, le viene por naturaleza.
El tinte en el cabello como nos ha mostrado la arqueología y todos los estudios que se han llevado a cabo, viene practicándose desde hace más de 6.000 años, concretamente en Oriente Medio. Es más, hasta los hombres lucían pelucas de pelo animal que teñían, años antes de Cristo.
En Oculto hair club hemos pensado hacer este post para explicaros toda la historia del tinte para el cabello, desde los primeros ingredientes que se empleaban hasta su evolución a día de hoy. La historia del tinte es tan antigua que ni siquiera nos la podíamos imaginar, así es que sigue leyendo y descubre todo sobre la curiosa historia del tinte para el cabello.
Origen del tinte en el pelo
Esta más que documentada, que ya, hace miles de años las personas se aplicaban en el cabello diferentes sustancias para cambiarlo de color. Ya en la Edad Antigua, los egipcios tan conocidos por el cuidado que le tenían a su piel y a su cabello ya empleaban el tinte.
En las tumbas se han encontrado numerosos aceites, cosméticos que usaban en su época.
Si es cierto, que el tintarse el cabello no era muy habitual en ellos, pero cuando lo hacían, utilizaban henna y kohl. Era más común que las mujeres egipcias emplearan pelucas y en cambio, los hombres se raparan.
También los griegos y romanos mostraron interés en el cuidado capilar, empleando igualmente la henna para tintarlo. Los romanos fueron un poco más hacia delante e iniciaron a usar otros ingredientes para teñir el pelo, originando hasta la decoloración.
Esta se llevaba a cabo mezclando las cenizas de madera de haya con sebo de cabra y se producía una pasta que se aplicaban al cabello. Y para el tinte, además de la henna, empleaban cortezas y bayas, iniciaron también a emplear sales de plomo, las cuales son tóxicas.
Así mismo, cabe destacar que en el mundo musulmán también se empleaba esta técnica de teñido, e incluso los hombres la usaban para teñir sus barbas con henna.
En el renacimiento, concretamente en Venecia, se inventó una nueva técnica de decoloración para conseguir el cabello más claro, está consistía en aplicar una solución de sosa natural y esperar unas horas al sol. Después de esta decoloración, el cabello podía tintarse.
El método anteriormente mencionado se fue extendiendo por el resto de Europa, llegando a Francia en donde fue muy apreciado.
Aquí, también se empleó para teñir el cabello la maceración y extracción de raíces, cortezas de árboles y plantas, poniéndose de moda otra técnica en la que usaban polvos a base de una mezcla de flores secas (violetas y lirios) con ceniza, mucílago de soporte y extractos vegetales.
En época barroca, triunfaron las pelucas, las cuales también se teñían, pero aun así también era frecuente utilizar tintes para el cabello.
Se empleaban los extractos que se obtenían de la cocción de plantas y de la maceración u otro método que consistía en secar las plantas, trocearlas y mezclarlas con cenizas de corteza de árbol.
Después este polvo se mezclaba con agua caliente y se aplicaba al pelo durante unas horas. En cuanto a la decoloración, se continuaba realizando según el método veneciano.
En el siglo XIX se empieza a utilizar el agua oxigenada (ayudada también por los rayos del sol) para decoloraciones, siendo conocida como “el agua dorada de la fuente de la juventud”.
Así mismo se emplearon el nitrato de plata, la parafenilendiamina y la anilina, que se había usado con anterioridad para teñir pieles.
Evolución del pelo teñido
Como hemos podido observar, la historia del tinte para el cabello hasta nuestros días ha sido un largo proceso, en el que se ha ido empleando todo tipo de ingredientes y técnicas para ir perfeccionándolo.
Ya en el siglo XX se produce una rápida evolución del tinte capilar, gracias al lanzamiento de los tintes líquidos, los cuales eran soluciones de colorante en agua y si se le añadía una cantidad de alcohol y de amoniaco, la eficacia del producto aumentaba.
Hasta entonces, solo había dos productos para el tinte capilar: agua oxigenada con amoniaco para decolorar y soluciones de colorantes con amoniaco para teñir.
Los tintes para el cabello como los conocemos en la actualidad fueron inventados por el químico Eugéne Schueller, el cual usaba la parafenilendiamina, siendo hoy, está, la base de la coloración.
Con esta sustancia se llevaron a cabo varios estudios los cuales concluyeron en que dicha sustancia tenía una baja toxicidad en relación a otros ingredientes que se habían usado con anterioridad, pero sí podría provocar algunas alergias en la piel.
Schueller, inicio a vender sus tintes a los peluqueros franceses e invirtió lo que gano en ello, en crear una fábrica de tintes, la “Fábrica de tintes inofensivos para el cabello”.
Años más tarde, fundó una nueva empresa que todos conocemos ya que actualmente sigue en funcionamiento: L’oreal.
En la actualidad, la cosmética capilar sigue avanzando, está en continuo desarrollo, en concreto en el ámbito de los tintes capilares, ya que los usuarios buscamos productos de calidad que protejan nuestro cabello y tratamos de evitar aquellos tintes que nos dañen o sean tóxicos, además de que cada vez más nos preocupamos por el medio ambiente.
Ahora que ya conoces toda la historia del tinte para el cabello, te invitamos a que te pases por nuestra peluquería donde encontrarás tintes de la mejor calidad y es que somos grandes profesionales en donde lo único que nos preocupa es el bienestar y el aspecto del cabello de nuestros clientes, así es que ven y descúbrelo tu mismo.